The One Memory of Flora Banks | Emily Barr
Salamandra | Realista | 288 pp. | 14.90€
~~Ficha técnica aquí~~
Sinopsis: Desde que la operaron del cerebro a los diez años, Flora Banks sufre un extraño tipo de amnesia: su mente no es capaz de recordar más allá de un par de horas. Hasta que un día, la imagen de un beso furtivo con Drake, el exnovio de su mejor amiga, surge de su memoria de forma casi milagrosa, un indicio esperanzador de que su mente podría funcionar con normalidad. Así que, cuando recibe un correo electrónico en el que Drake le propone que se encuentren en Noruega para contemplar el sol de medianoche, Flora se lanza a la aventura sin dudarlo, con la ilusión de volver a ser ella misma. Sin embargo, desde el momento en que llega a las islas Svalbard, todo resulta muy distinto a lo imaginado, y Flora tendrá que hacer honor al lema que lleva tatuado en la mano, «sé valiente», para asumir una verdad nada fácil de asimilar.
¡Hola, mininos! ¿Qué tal estáis? Hoy os traigo la reseña de un libro que ha sido toda una experiencia leer. Como habréis visto más arriba, lo he catalogado como literatura realista, pero en realidad es una combinación de varios géneros en una sola novela. Me ha gustado mucho la evolución del personaje principal, así que vamos a ver en detalle los aspectos positivos y negativos de El único recuerdo de Flora Banks.
Nuestra protagonista es Flora, una chica especial desde los diez años. Tuvo un accidente a esa edad y, a partir de ese momento, sufre episodios de amnesia que le impiden recordar todo lo que ha sucedido después. Es decir, la vida de Flora se resume en: perder la memoria y volver a pensar que tiene diez años, hasta que gracias a las cosas que se escribe en los brazos o en sus post-its se da cuenta de que en realidad tiene 17 años y nada es como ella creía. En un par de horas, todos los detalles que ha conseguido recopilar sobre su situación actual se pierden nuevamente. Y así una y otra vez. Entre las pocas cosas que recuerda Flora se encuentran su nombre, su dirección en caso de emergencia, y sus padres y su mejor amiga de la infancia, Paige. El resto, la mente de Flora no es capaz de retenerlo. Un día, Flora va a la fiesta de despedida de Drake, el exnovio de Paige, y se besa con él. Sorprendentemente, a la mañana siguiente recuerda ese beso prohibido. Su punto de partida ha cambiado, y ahora cada vez que pierde la memoria lo primero que recuerda es que ha besado a un chico, que ese chico se llamaba Drake, y que era el novio de Paige hasta que anunció que se iba a las Svalbard. ¿Y a dónde irá Flora? Detrás de ese chico que le ha hecho recordar de nuevo.
Quiero romper una lanza a favor de Flora, y es que es imposible no cogerle cariño. Si bien es cierto que a veces resulta un poco frustrante la narrativa, pues nosotros, al igual que ella, debemos recordar todos esos detalles que Flora necesita para seguir adelante. Y, bueno, al final os cansaréis de leer "mi nombre es Flora Banks; tengo 17 años; besé a un chico; se llama Drake y me ha hecho recordar". En ese sentido, creo que se parece un poco al halo de confusión que rodea al personaje de Caden en El abismo (reseña aquí). Unido a esto, también nos encontramos con que la voz narrativa puede parecer muy ingenua, rozando el infantilismo, al principio de la novela. Después de todo, cuando Flora recobra sus pocos recuerdos sigue pensando que tiene diez años y percibe la realidad como si de una niña se tratara. A pesar de eso, entiendo que la autora haya decidido llegar hasta ese punto de repetición y realismo a la hora de caracterizar a Flora, ya que consigue que el lector se meta totalmente en la piel de la protagonista. Flora es una muchacha intrépida y guerrera, soñadora, divertida; no me puedo ni imaginar lo horrible que tiene que ser darte cuenta de que no sabes por qué estás en cierto sitio, rodeada de extraños, con los brazos llenos de recordatorios y un tatuaje que dice: Flora, sé valiente. Es un personaje realmente entrañable, al igual que su hermano.
Como os comentaba al principio de esta reseña, El único recuerdo de Flora Banks es un popurrí de varios géneros literarios. Porque sí, parece que trata sobre una historia de amor, pero esta historia va mucho más allá. La trama amorosa no es más que el motor de arranque de esta aventura. También nos encontramos con un misterio que resolver, un chico al que encontrar en un país fascinante y exótico y muchas mentiras. Mentiras, las peores enemigas de Flora, pues ella es incapaz de recordar cuál era la verdad. Puede que el inicio de la novela sea un poco lento; no obstante, una vez Flora llega a las Svalbards todo se vuelve dinámico y desenfrenado. Flora, que apenas recuerda nada de su ciudad natal, se va a un país nórdico buscando a un chico y sin saber muy bien dónde encontrarle. Está sola, porque Paige ya no es su amiga y sus padres se encuentran a kilómetros de distancia. ¿Está tomando su medicación? ¿Está siendo sensata? ¿Se está comportando como una niña caprichosa al perseguir a Drake? Yo os invito a que le deis una oportunidad a este libro, pues nos cuenta una historia épica y preciosa. Acompañad a Flora en su viaje, y os aseguro que os hará reír, asustaros, sorprenderos o incluso llorar.
~Gracias a Boolino y a la editorial por el ejemplar
PUNTUACIÓN: 3.5/5 gatitos.
¿Lo conocíais? ¿Os ha llamado la atención? ¿Cometeríais una locura por amor?
Lilly.