[Reseña] Aquí empieza todo

Aquí empieza todo | Jennifer Niven

Cross Books | Autoconclusivo | Realista | 496 pp. | 14.95€

~~Ficha técnica aquí~~

Sinopsis: Todo el mundo cree conocer a Libby, aunque nadie se ha parado a pensar cómo es ella realmente, más allá de su aspecto y de su peso. También todos creen conocer a Jack, ese muchacho encantador que oculta un profundo secreto. Cuando una cruel jugarreta los enfrenta, los dos van a descubrir que la soledad compartida es menos solitaria. Son dos adolescentes rotos: de corazón a corazón.

~Gracias a la editorial por el ejemplar

¡Hola, mininos! Hoy os traigo la reseña de un libro bastante especial y que, tras haber leído, creo que no es para todo el mundo. Es mi primer contacto con la autora Jennifer Niven, así que creo que he salido beneficiada porque las reseñas de los bloggers que ya habían leído Violet y Finch (¡lo tengo pendiente!) han sido más bien regulares. No porque la historia sea mala, sino porque al ser tan diferentes la realidad no ha coincidido con las expectativas de los lectores. En general, Aquí empieza todo ha sido una novela que he disfrutado pero me he topado con algunos detalles que no me han convencido.

Los protagonistas de esta historia son Libby Strout y Jack Masselin, dos jóvenes que a simple vista parecen normales, pero que en el fondo ocultan unos secretos y unos sentimientos que, poco a poco, les van carcomiendo. La madre de Libby murió de forma repentina cuando ella no era más que una niña y a raíz de ese suceso empezó a buscar consuelo en la comida. Tanto es así, que unos años después se convirtió en la 'chica más gorda de América', en un espectáculo mediático después de que tuvieran que sacarla en grúa desde su casa porque no cabía por la puerta. Sin embargo, Libby decidió luchar y cambiar, ya no sólo por ella, sino también por su padre. Ha perdido muchísimo peso y aunque todavía tiene unos kilos de más, Libby está preparada para volver a ir al instituto y relacionarse con la gente. ¿O no? Jack es un chico de piel oscura, encantador y muy popular. Es el novio de Caroline Lushamp (Miss Perfección, como ya os podéis imaginar por su glamuroso nombre) y tiene un pelo afro envidiable. Puede que parezca que Jack es feliz, pero su familia se está desmoronando lentamente y él cada vez está más convencido de que tiene una enfermedad llamada prosopagnosia: no es capaz de reconocer los rasgos faciales de las personas, por lo que no importa cuántas veces vea un rostro, este siempre sigue siendo irreconocible en su conjunto. No pasa nada, ¿verdad? Es el chico más popular del instituto, es normal que no se acuerde del nombre de todos sus fans, ¿verdad?

Aquí empieza todo es una novela que se centra por completo en Libby y Jack, casi sin dar margen para personajes secundarios, si bien hay algunos que tienen un poquito más de protagonismo que otros, como por ejemplo el padre y el hermano pequeño de Jack. La verdad es que es muy difícil llegar a conocerlos incluso si alguno nos resulta especialmente interesante (a mí me encantaron las reuniones con el grupo de castigados; ¡qué épicas!) pero tampoco vamos a engañarnos: desde la primera página sabemos que lo que vamos a leer es la dramática historia de cómo este chico y esta chica empiezan a conocerse. Su evolución está muy bien conseguida, de hecho es más que probable que conforme leas la novela vayas entendiendo detalles que al principio te habían parecido banales. Resulta increíble lo mucho que pueden llegar a sufrir las personas, incluso a una edad tan temprana, y creo que ese es uno de los puntos fuertes del libro porque consigue ablandarte el corazón. Me encanta que Jennifer Niven trate temas tan contemporáneos y esenciales como la homosexualidad, el sobrepeso, la hipocresía, el bullying o la superación personal. Además, a pesar de que muestra el lado más crudo de estas realidades que a veces la sociedad se esmera en esconder bajo la alfombra, también nos ofrece una actitud optimista, luchadora y llena de esperanza. 

No obstante, a mí personalmente a veces tanto drama me termina sacando de la lectura (será por eso que me gusta tanto la fantasía, no hay reglas lógicas que seguir) y el formato del libro no me terminó de convencer. Me parece perfecto que contemos con el punto de vista de ambos protagonistas, pero que los capítulos fuesen tan breves y se alternasen constantemente me descolocaba en lugar de ayudarme a que la lectura fuese más amena. Eso sí, no voy a negar que Libby y Jack son personajes que me han encantado porque son completamente redondos. Estoy segura de que después de leer este libro miraréis vuestras zapatillas de forma diferente, que os reiréis al pensar en el método favorito de Libby para perder peso y que querréis luchar por vuestros sueños, por mucho que el resto del mundo os diga que no servís para eso. No me cabe duda de que después de leer este libro daréis las gracias en silencio por poder reconocer a vuestros seres queridos, por tener a personas realmente especiales en vuestra vida y porque, para qué engañarnos, Jack os ha hecho daros cuenta de que no hace falta ser un chico malo para tener encanto natural. 

El final del libro me ha dejado un sabor agridulce, pues me ha dado la sensación de que realmente no ha ocurrido gran cosa en la historia (a diferencia de Eleanor y Park, una novela con elementos muy similares a Aquí empieza todo). Sí, ya sé que he dicho que se trata de una novela de personajes, pero me ha dado la sensación de que la historia no ha llegado al punto que debía; esto es completamente subjetivo, por supuesto. Para ser la primera novela que leo de Jennifer Niven no ha estado mal, aunque en cuanto pueda voy a comprarme Violet y Finch porque me llama mucho la atención y creo que me gustará más. La edición del libro me parece preciosa y la portada me parece sublime, es muy minimalista y elegante, así que me gustaría felicitar a la editorial por haber tomado la decisión de conservar la portada original.

Puntuación: 3/5 gatitos.

¿Habéis leído este libro? ¿Me recomendáis Violet y Finch? ¿Os gustan las novelas que tratan temas tan polémicos?

Lilly.